miércoles, julio 06, 2005

Perdóname...


Y es que veo tanta ternura en tu interior hacia mí, que solo podría ser compensada con amor. Pero con el dolor de mi corazón, he de decirte en este escrito, que en mis sentimientos no mando. Solo soy esclavo de ellos; y no soy capaz de sentir ese sentimiento tan fuerte hacia ti.
Tienes todo cuanto quería en una mujer. Ese brillo en tu mirada, esa dulzura en tu ser, esas atenciones que solo es capaz de tenerse a alguien cuando se le quiere. Esos hermosos detalles que tienes hacia mí.
Hoy tengo miedo. Miedo de seguir alargando algo que tiene final. El que te encariñes más de mi y yo no pueda corresponderte de la misma manera.
Quisiera mandar en mi corazón y simplemente amarte. Y es que veo tanto potencial en ti; tantos y tantos motivos para amarte. Y no soy capaz de hacerlo.
Se que a tu lado sería feliz; y que tu jamás me harías sufrir. Que mirarías siempre por mi bienestar y mis intereses; y que mi corazón en ti estaría siempre confiado.
No sé si enseñarte esto y terminar de una vez. O esperar a ver si con el tiempo este sentimiento pueda surgir. El caso es que no lo veo posible. Simplemente no creo que sea así.
Solo me queda por decir gracias por tan bonitos momentos; gracias por tanta ternura; gracias por tanto que me haz dado. Incluso sin yo merecerlo.
Gracias por tu confianza; gracias por tus ilusiones; gracias por compartir un poquito de tu vida junto a mí. Y créeme; ha sido un hermoso regalo. Y perdona mi forma de agradecerlo, siendo sincero; y creyendo de corazón que haciendo esto; estoy renunciando a una gran mujer. La cuál nunca olvidaré.

AGD